martes, 14 de septiembre de 2010

Mañana






Es como la rola esa de mi árbol y yo...
Recuerdo que veníamos de la casa de mi abuelita, yo venía con mi papá en la camioneta y en mis piernas el pequeño Pino en una maceta, no sé yo tenia como cinco.

El Pino ahora ya esta seco.






Son como las siete de la mañana, apenas estoy despertando, las persianas no dejan pasar la luz a mi recámara, pero el ambiente se siente frío, puedo apostar que es un día nublado.

Me levanto de la cama, mi astigmatismo y la miopía hacen que lo primero que haga es buscar mis lentes.
Estoy abriendo las persianas, por alguna razón ahora las estoy abriendo del lado que no estoy acostumbrado, esta vez dejo que entre toda la luz a la recámara, los rayos del Sol pegan en mi cara (estaba equivocado al decir que el día es nublado, es mas es un día muy muy bonito) y a primera vista no me dejan ver con claridad lo que esta pasando...


Veo venir una rama verde verde, que desde el otro lado del patio ahora esta chocando con mi ventana, en segundos el patio se llena de verdes, rojos, rosas...
Hay algo que me sorprende mas, ayer que me fui a dormir, el Pino estaba seco, lo vi seco, pero ahora esta lleno de vida, es como un sueño.

Corro hacia la otra habitación, esta da a la calle, te miro caminando, y te grito para que vengas a ver lo que esta sucediendo, pero tu estado no te lo permite.

Ahora solo me concentro en ti y me llena de emoción lo que esta por venir. Abro la puerta de la calle y nos encontramos con una sonrisa, tomas mi mano y ...





"El instante en que te vi, aun sigo ahí, mirándote entrar, supe que no existía yo para ti, me heriste...
Ahora te miro y te vuelves hermosa con tu mal humor, ahora te hablo y esa es toda la conversión.

Porque a veces me miras? para que hacerme ilusionar?

Porque a veces me miras? te espero".







En verdad yo no te conozco bien.